En febrero del 2015,
tuve la suerte de ser invitada a Panamá por una amiga mía panameña que vive
mitad del año en Panamá y mitad en EE. UU.
Nunca imagine que algún día iba a poder visitar ese país. Fue un viaje fantástico,
un clima espectacular y con gente hermosa.
Como viaje en febrero,
en Michigan estaba nevando y hacia muchísimo frio y al llegar a Panamá me
encontré con el cambio abrupto de clima. En Panamá siendo pleno verano hacia un
calor impresionante. Yo no soy amante del frio así que estaba en mi salsa.
A mi amiga le encanta
manejar, así que me llevo a conocer muchísimos lugares. Panamá es distinto a
otros países que he visitado. Pareciera pequeño, es moderno, pero a su vez
conservador. Tiene sus barrios elegantes, como también sus barrios clase media
y pobres también. Me gusto mucho el hecho de que siempre ves agua, yo amo el
océano, muchas veces digo que debería haber sido Delfín. La vegetación es
preciosa, las flores de tantísimos colores y variedades le dan una imagen tan
hermosa a todos los lugares. Como en Miami o puerto Rico hay palmeras por todos
lados y a mí me fascinan.
Como fui en época de
carnavales, lo primero que hicimos fue ir a un pueblo que se llama Chitré en
las Tablas. Me gustó mucho el contraste de la vegetación entre Chitré y la
ciudad. Ahí fuimos para ver los desfiles. Cada día hay un tema diferente, como
por ejemplo tema fantasía y las carrozas cambian de motivo al igual que los
vestido, disfraces y polleras. Fue algo novedoso para mí y me gusto muchísimo.
El pueblo se divide en dos los de “Calle arriba” y los de “Calle abajo” y
compiten con desfiles, carrozas, fuegos artificiales, vestidos, etc. Todo en un
clima festivo, mucha música y baile y la comida típica muy deliciosa. Ahí estuvimos toda la noche hasta las 3am. Al
otro día nos fuimos a ver lo que llaman “La mojadera” todo el mundo tirándose
agua, música, comida, alegría en fin son los Carnavales.
La comida me hace
acordar a Puerto Rico. Arroz con gandules, empanadas, sándwiches de carne.
Estuvimos en el Casco
viejo, nombre que recibe el sitio adonde fue trasladada en 1673 la ciudad de
Panamá. Muy bonito y típico. Otro día me llevaron a un restaurant típico “Las
Tinajas” con comida deliciosa y un Show espectacular. Fuimos a Chepo al puerto Coquira,
y de ahí a un balneario.
La Sra. Del balneario
me regalo plátanos y gandules, que ellos le llaman “Guandu” También probé el
jugo de maracuyá que me supo a jugo de durazno. Probé otra bebida llamada “Chicheme”
pero no me gusto. En Panamá se come mucho la yuca frita, tostones que ellos le
llaman patacones (Hechos de plátano) también hacen el plátano tentación que es
delicioso porque es como acaramelado y unos bollitos de yuca.
Seguimos paseando y
esta vez fuimos a una playa en Punta Chame. Hermosa y el agua estaba calentita.
Me metí en el agua y no Sali en toda la tarde. Fui picada por un agua viva pero
no me importo. Amo la playa.
Otro paseo fue ir a ver
al Cristo negro de Atalaya que en Panamá es de gran devoción. Me pareció muy
hermoso.
Paseo esperado “El
Canal de Panamá” fuimos al museo, vimos como entraba un barco al Canal, y de ahí
nos fuimos a un restaurant donde comimos mas comida típica. Ropa Vieja y Buñuelos
o oreja de elefante o hojaldre como le llaman ellos.
Nuevo paseo por la Cinta
Costera. Una vista hermosísima. Me hubiera quedado ahí días. Al otro día fuimos
a Panamá viejo de compras. Y al día siguiente a otro lugar super hermoso “Taboga”
Una isla a la cual se llega en una lancha o como le llamamos los argentinos catamarán.
Es un lugar hermoso, se ve como las películas italianas. Lo primero que se ve
es una montana llena de casitas hermosas que desembocan en la playa, todo
rodeado de una vegetación increíble, flores de todo tipo y colores. El agua calentita
y la arena suavecita y no hay olas, parece una piscina. Ahí pase toda la tarde
otra vez en el agua.
Nuevo día, nuevo paseo,
esta vez en barco por el Canal. Fue una experiencia única estar en el canal,
ver como se abren las compuertas y ser parte del proceso. Realmente me maravillo
porque nunca en la vida había pensado en ir a Panamá y menos conocer el famoso
Canal.
Últimos paseítos,
fuimos hacia Colon, luego a ver al Cristo Negro rodeado por lugares antiguos,
ruinas, y de ahí al Valle de la Luna, a donde broto agua y la virgen pidió una
Iglesia.
Pues así termino mi
recorrido por parte de Panamá, entre turismo, amistades, encuentros familiares,
Misa, visita a lugares religiosos, comida y bailes típicos. Fue una experiencia
maravillosa y llevo los recuerdos de lo bello que es Panamá y su gente en el corazón.
En este enlace se puede
ver mucho sobre Panama.